La etapa final del proceso de organización legal, que data de la década del 90’, fue apoyada por la División de Estudios, Desarrollo y Políticas de la Comisión Nacional de Riego.
Con el nombre de “Asociación de Canalistas del Canal Cayucupil” se constituyó la primera y única Organización de Usuarios de Agua (OUA) de la provincia de Arauco, bajo la figura de Comunidad de Aguas, con lo cual podrán, a partir de ahora, postular a los distintos instrumentos de fomento del Estado, destacándose entre éstos la Ley de Fomento al Riego.
La constitución legal era parte de los objetivos del programa de la Comisión Nacional de Riego denominado “Capacitación y Apoyo a Regantes del Canal Cayucupil”, financiado por el Gobierno Regional del Biobío.
El objetivo general fue contribuir al mejoramiento de la competitividad de los sistemas productivos de los regantes del sistema de riego del Canal Cayucupil, a través de su constitución legal, el fortalecimiento organizacional y la generación de capacidades en riego.
La anhelada conformación legal de esta organización se concretó mediante la Resolución exenta DGA N°2455. De esta manera se ordena el registro y se declara organizada la Comunidad de Aguas perteneciente a la comuna de Cañete, en la provincia de Arauco, región del Biobío.
“Estamos muy contentos con esta tremenda noticia, que beneficia a los agricultores del valle de Cayucupil, que por tanto tiempo han esperado constituirse legalmente para conformar una organización de regantes empoderada”, señaló el Secretario Ejecutivo de la CNR, Federico Errázuriz.
“Esperamos que los regantes que ya cuentan con sus derechos de aguas comiencen cuanto antes a postular sus proyectos de tecnificación a la Ley Nº18.450, porque sabemos que con riego el valle de Cayucupil puede sacar todo su potencial agrícola y mejorar la calidad de vida de muchos agricultores de la provincia de Arauco”, añadió.
Canal Cayucupil
El canal Cayucupil es una obra fiscal construida hace más de 40 años, periodo en el que sólo se han traspasados derechos de aprovechamiento de aguas en los primeros 8 kilómetros, quedando pendientes otros 20 kilómetros. Actualmente utilizan las aguas 98 agricultores, de los cuales el 19% es de origen Mapuche-Lafkenche, mientras que entre los usuarios y potenciales usuarios del canal suman un total de 307 agricultores, todos de la comuna de Cañete, destacando la presencia de 22 comunidades indígenas en el territorio.
“En términos prácticos esta constitución legal permitirá a 58 agricultores, que tienen derechos de aguas en los primeros 8 kilómetros del canal que están traspasados por la DOH a los regantes, postular a proyectos de tecnificación y el hecho de que exista una organización formal permitirá a futuro seguir avanzando en el traspaso del resto del canal para que más regantes puedan contar con derechos de aguas”, señaló el Coordinador Zonal Biobío-Ñuble de la CNR, Javier Ávila.
Por su parte, el Seremi de Agricultura, Francisco Lagos, señaló que “el Presidente Sebastián Piñera y el Ministro Antonio Walker nos han solicitado desde el inicio del Gobierno que nos preocupemos de mejorar la calidad de vida en las zonas rurales, por esta razón nos alegra saber que el Valle de Cayucupil hoy cuenta con una organización de regantes constituida legalmente y estamos seguros de que esta primera directiva sabrá trabajar mancomunadamente con los distintos actores del territorio, para beneficiar con riego una zona de un gran potencial agrícola”.
Ingrid Arce es la presidenta de la comunidad indígena Pedro Melita e integrante del actual directorio provisorio de la nueva comunidad de aguas. “Estamos muy contentos con este gran paso dado que lo esperamos por tantos años. Seguiremos trabajando con la esperanza de que todos nuestros agricultores, que son más de 180, logren contar con sus derechos de aguas, para aumentar la productividad de este valle que cuenta con un microclima privilegiado”, destacó.
El programa de la CNR además promovió acciones de fortalecimiento organizacional, con lo cual se ha logrado el levantamiento de nuevos liderazgos, que incluyeron la incorporación de una mujer indígena en el seno del directorio provisional, haciendo más dinámico el trabajo de la organización gracias a su estilo de liderazgo.
De igual manera, se cerró la temporada de riego 2019-2020 con una baja significativa de conflictos, concentrados en la emergencia sanitaria, y asumiendo nuevos desafíos a partir de los aprendizajes alcanzados, en armonía con los actores sociales relevantes del territorio.