Los transportes marítimo y aéreo son cruciales para el comercio y la movilidad del mundo de hoy. De su buen funcionamiento dependen las cadenas globales de suministro de bienes y servicios, así como la ayuda humanitaria. Aunque son esenciales en el engranaje de la economía y la vida moderna, los trabajadores de estos sectores carecen de la protección adecuada para los riesgos que asumen. Cinco agencias de la ONU urgen a los países a incluirlos en la lista prioritaria para recibir la vacuna COVID-19.
Más del 80% del comercio mundial es posible gracias a la labor de dos millones de marinos que operan la flota de buques mercantes, mientras que el transporte aéreo representa el 35% del valor de las mercancías enviadas en todos los modos combinados y hasta 2019 empleaba a 887.000 profesionales con licencia: pilotos, controladores de tráfico aéreo y técnicos de mantenimiento.
Todos estos empleados son trabajadores esenciales porque sin ellos el comercio y la economía del mundo globalizado de hoy se paralizaría con consecuencias que agudizarían la crisis derivada de la pandemia de COVID-19. Además, su labor es fundamental para la recuperación socioeconómica, afirmaron este viernes cinco agencias de la ONU, conminando a todos los países a incluir a este colectivo en las listas prioritarias de vacunación contra el COVID-19.
En una declaración conjunta, la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Organización Marítima Internacional (OMI), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) recordaron que el transporte por mar y por aire depende de la gente de mar y la tripulación aérea.OMMLa Organización Marítima Mundial ha pedido a los Gobiernos que reconozcan a la gente del mar como trabajadores esenciales.
A través de las fronteras
“Son trabajadores clave que deben viajar a través de las fronteras en todo momento, lo que puede resultar en la necesidad de que presenten prueba de una vacuna COVID-19 como condición para la entrada en algunos países”, apuntaron, aclarando que la OMS ha desaconsejado ese requerimiento porque todavía no se conoce con precisión la eficacia de la vacunación para reducir la transmisión y por la disponibilidad limitada de vacunas.
Para que los sectores marítimo y aéreo sigan operando de forma segura, se debe facilitar el movimiento transfronterizo seguro de la gente de mar y la tripulación aérea, por ello, los organismos del sistema de las Naciones Unidas urgieron a los países a sumar a estos trabajadores a la categoría de esenciales.
“Urgimos a los gobiernos a que prioricen a la gente de mar y a la tripulación aérea en sus programas nacionales de vacunación contra COVID-19 junto con otros trabajadores esenciales, de acuerdo con el consejo de la OMS para determinar el uso de esas inmunizaciones en el contexto de oferta limitada”, recalcaron, refiriéndose a la Hoja de Ruta SAGE de la OMS publicada en noviembre pasado.
“La gente de mar y la tripulación aérea deben estar protegidos mediante la vacunación lo antes posible, para facilitar su movimiento seguro a través de las fronteras”, añadieron las agencias.Unsplash/Ismail Mohamed – SoviLePasajeras en un avión durante la pandemia de COVID-19.
Estrategias adecuadas
Asimismo, recomendaron a los gobiernos que identifiquen los desafíos de la inmunización de la gente de mar y la tripulación aérea, en particular de los marineros que pasan periodos largos fuera de su país de origen, y que diseñen estrategias adecuadas.
“Nuestras organizaciones apoyan plenamente el desarrollo oportuno de un marco internacional armonizado para los certificados de vacunación con el fin de facilitar los viajes internacionales de la gente de mar y la tripulación aérea”, declararon.
La gente de mar ha sido muy afectada por las restricciones de viaje impuestas durante la pandemia. En enero de 2021 se calculó que unos 400.000 marinos están varados a bordo de buques comerciales, mucho después de la expiración de sus contratos, sin poder ser repatriados. Un número similar de marinos necesita con urgencia unirse a los barcos para reemplazarlos.
Por su parte, la tripulación aérea padeció la aplicación de estrictas reglas de salud pública, incluida la cuarentena, lo que creó problemas de conectividad, complejidad operativa y costos significativos para el sector. El sector aéreo de pasajeros transportó alrededor de 5.700 millones de pasajeros en 2019.