- La iniciativa, que se desarrollará durante 18 meses, contempla la capacitación de 15 empresas en áreas de innovación de alimentos funcionales y saludables. Eso, con la finalidad de que logren destacarse en el mercado.
Brindar asesoría a 15 pymes de la zona en áreas de innovación de alimentos funcionales y saludables para así mejorar la competitividad, comercialización y calidad de sus productos es el objetivo del proyecto “Centro de asistencia técnica a pymes de alimentos” de la U. San Sebastián sede Concepción. La iniciativa, en que ya hubo una reunión con las empresas preseleccionadas, es financiada por el Fondo de Innovación para la Competitividad del Gobierno Regional del Biobío.
Los problemas que abordará son la elevada tasa de malnutrición por exceso, el aumento de enfermedades crónicas no transmisibles (como diabetes e hipertensión), la baja innovación en ingredientes saludables para la producción de alimentos y la escasa disponibilidad de asistencia técnica a los emprendedores del rubro alimentario. Dichos aspectos, se abarcarán durante 18 meses a través de diversas actividades de capacitación, asesoría y acompañamiento técnico profesional.
Para el encargado del proyecto, Bautista Espinoza, académico de Nutrición y Dietética de la USS, las nuevas tendencias de alimentación más saludable, libre de aditivos artificiales y que incorpore ingredientes y alimentos funcionales en su formulación, son consideradas un agente diferenciador valorado por un número de consumidores en ascenso. “A pesar de que se pueden encontrar emprendedores en la Región del Biobío que realicen actividades de innovación alimentaria, aún falta el conocimiento técnico”, dijo.
Según la coordinadora y académica de Nutrición y Dietética USS, Fabiola Fuentealba, las actividades del proyecto serán personalizadas acorde a las necesidades de cada pyme. De hecho, destacó el Diplomado Regional de Etiquetado e Innovación Alimentaria para las empresas beneficiarias y la creación del sello “Biobío Alimentario” para mejorar la competitividad de las pymes a nivel regional y nacional. “Está pensado como una manera de que los participantes puedan tener una certificación universitaria y con ella, seguir desarrollando sus propios emprendimientos e iniciativas”, puntualizó.
Finalmente, una de las beneficiaras, la dueña de la panadería Trankuy, Andrea Doyhamberry, agradeció la iniciativa que busca apoyar a las pymes con información estratégica para su rubro. “Junto con mi papá esperamos sacarle provecho a la información nutricional y al etiquetado de nuestros productos saludables”, aseveró.