El fundador de Revista Trilce falleció este viernes a la edad de 80 años en Concepción, ciudad en la que residía.
Este viernes 2 de julio se dio a conocer en los medios de comunicación nacional el lamentable deceso del destacado poeta, traductor y editor chileno Omar Lara, quien fuera fundador y director de la revista de poesía Trilce, creada bajo el alero de la Escuela de Castellano de la antigua Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Austral de Chile en 1964.
Omar Lara nació en Nueva Imperial el 9 de junio de 1941. Durante su juventud fue uno de los principales actores y promotores de la escena literaria en el país, publicando antologías y liderando el desarrollo de encuentros poéticos en el sur de Chile a través de Grupo Trilce, iniciativa estudiantil originada en Valdivia. Esta agrupación -integrada por Carlos Cortínez, Enrique Valdés, Luis Zaror, Eduardo Hunter, entre otros- tuvo como principal hito la fundación de Revista Trilce, publicación que se posicionó como un importante referente académico y literario tanto en Chile como en Latinoamérica.
Tras el golpe de Estado en nuestro país, el poeta fue encarcelado durante tres meses, tras lo cual se exilió en Perú; tiempo después se trasladó a Europa, donde se asentó por diez años en Rumania, país donde comenzó a incursionar en la traducción de poesía y se graduó en Filología en la Facultad de Lenguas Romances y Clásicas de la Universidad de Bucarest.
En 1981, Omar Lara se instaló brevemente en Madrid, España, donde refundó la Revista Trilce e inició las publicaciones de Ediciones LAR (Literatura Americana Reunida), las que actualmente funcionan desde Concepción, ciudad en la que el poeta residió hasta el día de su muerte.
Entre sus obras más destacadas se encuentran Argumento del día (1964), Los Enemigos (1967), Serpientes (1974), El viajero imperfecto (1979), Fugar con juego (1984), Jugada Maestra (1998) y Voces de Portocaliu (2003).
Durante su trayectoria, obtuvo importantes reconocimientos como el Premio de la Casa de las Américas de Cuba en 1975, el Premio Internacional Fernando Rielo (1983) por sus trabajos de traducción, la Medalla Mihai Eminescu en Rumania (2001), la Medalla Presidencial Centenario de Pablo Neruda (2004) y, en 2007, el VII Premio Casa de América, de España, con su libro Papeles de Harek Ayun.
Legado institucional
El poeta, que fue parte activa de la comunidad de la Universidad Austral de Chile, primero como bibliotecario y después como Director de la Oficina de Publicación y Radiodifusión, mantuvo un nexo constante con la Facultad de Filosofía y Humanidades, perpetuando su legado como artífice del Grupo Trilce y asistiendo en innumerables ocasiones a encuentros académicos de diálogo y reflexión en torno a la literatura y poesía.
El Rector de la UACh, Dr. Hans Richter, manifestó que “como Universidad lamentamos profundamente la partida del destacado poeta, traductor y editor chileno, Omar Lara, quien dio renombre a nuestra institución en el país y en América Latina. Desde inicio de los años 60 el poeta tuvo una importante participación en numerosos proyectos culturales y festivales de literatura, contribuyendo ampliamente a la literatura nacional. Con tristeza despedimos a quien ha enaltecido a nuestra casa de estudios, pero sabemos que su promoción cultural acompañará siempre a nuestra Universidad y al área de las letras”.
Por su parte, el Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Dr. Mauricio Mancilla, destacó la capacidad de Omar Lara de convocar a diversas voces a través de la gestión cultural y literaria. “Ha partido uno de los grandes de la literatura chilena y que fue parte de la historia temprana de nuestra casa de estudios. Omar Lara dejó su nombre grabado en la piel de la Universidad Austral de Chile gracias a la fundación de la revista de poesía Trilce, de la cual fue director. Desde muy joven se caracterizó por su enorme capacidad de convocar a distintas voces, a través de la organización de encuentros y la publicación de antologías. Trilce fue el espacio de reunión y diálogo de innumerables poetas de diferentes latitudes del mundo. Durante su exilio en Rumania perseveró en esta incansable vocación. Nos llena el alma de tristeza su partida, pero nos quedamos con el recuerdo de su rectitud y de su incansable amor por la literatura”, puntualizó.
El Director de Ediciones UACh y ex Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Dr. Yanko González, recordó el paso del poeta por la institución y valoró su rol como actor clave en la recepción, circulación y descentralización de la literatura chilena desde su arribo en 1963 a nuestra casa de estudios. “Trilce emergió en el contexto de la formación de una nueva institucionalidad, donde la cultura era una preocupación que pasaba por la vocación pública de nuestra universidad. Además de haber actuado como aglutinante de una generación, Omar Lara reúne en su poesía los aportes más imperecederos de la misma: la resignificación y propuesta de un discurso poético alterno a Enrique Lihn, Nicanor Parra o Jorge Teillier, su herencia inmediata. Se encuentran huellas de aquellos autores y poéticas, por cierto, pero su obra desbroza y transita un mapa amplio y complejo donde converge de manera singular una ‘nostalgia reflexiva’, sello y presencia de su voz. Una poesía breve, sin sobresaltos ni experimentos, suspicazmente prudente en el desgarro y un hablante que se piensa en la realidad describiéndola ajena o muy íntimamente. Una poética conjugada con inteligencia, afecto y saber y que le llevaron muy merecidamente a ser ampliamente reconocido aquí y fuera del país. Lo recuerdo hoy, con su poema ‘Asedio’, de su libro Los Buenos Días que -siempre lo supo él- fue uno de los primeros libros de poesía que leí: Mira donde pones el ojo// cazador// lo que ahora no ves// ya nunca más existirá// lo que ahora// no toques// enmohecerá// lo que ahora no sientas// te ha de herir algún día“, expresó el Director de Ediciones UACh.
El hondo pesar por la partida del destacado escritor se siente de igual forma en la comunidad creativa de la Región de Los Ríos. La también la poeta, escritora y traductora Verónica Zondek expresó su sentir a través de las siguientes palabras: “Omar Lara, poeta a quien conocí recién vuelta a Chile en casa de Humberto Díaz Casanueva, nuestro amigo común, ha muerto. Desde entonces, intentamos muchas veces hacer cosas, pero siempre se interpuso la realidad para impedirlas. También coincidimos en muchos encuentros, lecturas y reuniones literarias. Sin embargo, lo verdaderamente nuestro era, cuando se daba, el conversar a lengua suelta. Como todo en la vida, quedó mucho pendiente: ‘mañana fijamos fecha’, ‘te prometo que…’ y así, para no perdernos de vista. En fin, maldita costumbre del ‘mañana’. Omar ya no está y lo que pensábamos hacer, ya no fue. Así es la tristeza, irreparable. Y aquí en el sur, leeremos su poesía mientras la tetera silba bajito sobre la estufa”.
Trilce: orígenes de una leyenda
A partir del impulso dado por un grupo de estudiantes deseosos de cultivar la poesía a partir de la activa productividad creativa de la Generación Literaria de los 50 tanto a nivel nacional como latinoamericana. Entre sus miembros fundadores se encontraban Claudio Molina, Luis Zaror, Enrique Valdés y Omar Lara, uniéndoseles al poco tiempo Carlos Cortínez, Federico Schopf, Juan Armando Epple, Walter Hoefler, Waldo Rojas, Jaime Concha, Guillermo Araya, Eugenio Matus, Gastón Gaínza, Carlos Santander, Grínor Rojo, Juan Guido Burgos, Carlos Ibacache y Luis Oyarzún. En varias ocasiones igualmente se contó con expresos apoyos de Félix Martínez Bonati (ex Rector de la UACh) y del crítico y ensayista Prof. Luis Bocaz.
El poeta Omar Lara ha sido el que ha encarnado la permanencia y continuidad de la publicación en el tiempo. La revista ha sido y sigue siendo un verdadero reservorio de las más relevantes letras de la poesía nacional e internacional, constituyéndose en un referente obligado a nivel mundial de la poesía latinoamericana. Durante su medio siglo de existencia, Trilce ha cobijado en sus páginas a una brillante constelación de poetas y escritores, entre los que se cuentan a Bertolt Brecht, Guillaume Apollinaire, Octavio Paz, Roberto Fernández Retamar, Pablo Neruda y Roberto Bolaño. Desde el nivel nacional hacia el mundo, tampoco podemos dejar de mencionar a Enrique Lihn, Luis Oyarzún, Jorge Teillier y al propio Omar Lara, entre otros.