Para revertir en parte este escenario, se analizaron los recursos hídricos disponibles y se diseñaron 60 perfiles de proyectos de riego individuales y otros 10 de carácter colectivo asociados a sistemas fotovoltaicos de bajo costo de operación.
La Comisión Nacional de Riego (CNR) finalizó el estudio denominado “Diagnóstico de sitios para pequeños acumuladores con uso de energías renovables, para el riego de la pequeña agricultura de la provincia de Arauco”.
El objetivo general de la iniciativa fue contribuir al uso eficiente del agua mediante la identificación de sitios para la acumulación de pequeños volúmenes de agua para riego, bebida animal y fines domésticos de acuerdo con las necesidades de los pequeños agricultores, agricultoras y comunidades indígenas de la Provincia de Arauco, incluyendo la solicitud y regularización de derechos de agua superficial en el caso de las comunidades.
Respecto a esto, el coordinador zonal Biobío-Ñuble de la CNR, Javier Ávila, manifestó que “sabemos que el riego es un factor de cambio para muchas familias de nuestro país y por lo mismo nos interesa que en la provincia de Arauco podamos como CNR estar más presente. De a poco lo estamos realizando, primero a través un programa de capacitación que permitió constituir la primera y única organización de usuarios del agua de la provincia, y ahora a través de este estudio que busca dar soluciones concretas en materia de riego”.
Por su parte el seremi de Agricultura, Francisco Lagos, indicó que “impulsaremos y apoyaremos cualquier iniciativa tendiente a mejorar la calidad de vida de los habitantes de la provincia de Arauco, porque el mandato que nos dejó el Presidente Sebastián Piñera es ocuparnos de quienes habitan en zonas que han quedado rezagadas y desde Agricultura sabemos que el riego cambia vidas, por lo que seguiremos trabajando para lograr que Arauco cuente con las herramientas necesarias que le permitan sacar todo su potencial”.
Uno de los principales resultados del estudio fue el desarrollo a nivel de perfil de 60 proyectos de riego individuales y 10 comunitarios, con fuentes de agua superficial, subterránea y aguas lluvias. Todos estos proyectos son alimentados con energía eléctrica a través de paneles fotovoltaicos. Además, permitió dejar iniciadas 27 solicitudes de derechos de aguas superficiales acorde a los proyectos superficiales elaborados, cuyos caudales de diseño fueran mayores a 1l/s.
“Creemos que los perfiles de proyectos que se diseñaron en este estudio pueden constituirse en el primer paso para que la agricultura familiar campesina se relacione con cultivos que puedan mejorar su calidad de vida, por lo tanto, ahora nuestra misión como autoridades será buscar el financiamiento para que estos perfiles de proyectos se materialicen en sistemas de riego con bajo costo de mantención, gracias a las energías renovables”, agregó Ávila.
En el desarrollo de esta iniciativa se constató el gran interés de los agricultores y agricultoras de toda la provincia por contar con sistemas de riego. “El clima es óptimo para berries y algunos frutales de hojas caducas y esto a futuro puede seguir mejorando dado el cambio climático. En cuanto a cultivos anuales y hortalizas es posible una amplia gama de especies tales como; trigo, papas, porotos, lechugas, zanahorias y además las praderas se adaptan favorablemente”, puntualizó el informe.
Finalmente, se recomienda que las fuentes de financiamiento para todos los proyectos elaborados sean los concursos de riego de Indap, Conadi, el Programa de Pequeña Agricultura de la CNR, fondos Gore y la Ley Nº18.450.