Cambios consideran incentivos a la vacunación, permitiendo a quienes ya han cumplido con su esquema de inmunización poder realizar mayores actividades dentro de las distintas fases. Además, se contempla la apertura de cines, teatros, gimnasios, la ampliación de aforos, clases presenciales y modificaciones en el toque de queda, pero siempre y cuando se cumplan los requisitos sanitarios. Las nuevas medidas generan debate entre los especialistas, quienes llaman a mirar tanto el aspecto virológico como social-mental asociado a la pandemia.
Este jueves 8 de julio, el Ejecutivo anunció cambios importantes en el llamado Plan Paso a Paso. Las modificaciones, que serán implementadas a contar de la próxima semana, incluyen la apertura de gimnasios, cines, restaurantes, el retorno de público a estadios y el retorno a clases presenciales con asistencia voluntaria, desde la fase de cuarentena, para quienes así lo decidan y deseen. También se anunció un nuevo horario de toque de queda, el que será de 00:00 a 05:00 de la mañana, siempre y cuando el 80 por ciento de la población a nivel regional esté vacunada y la tasa de casos activos sea menor a 150.
Las modificaciones y nuevas medidas son miradas con precaución por los especialistas, dado que esto podría implicar un aumento en los casos de coronavirus. Adicionalmente, este viernes se dieron a conocer 10 nuevos casos de contagios con la variante Delta, correspondientes a personas que ingresaron a nuestro país, pese a que las fronteras se encuentran cerradas y solo en casos específicos se puede arribar a Chile.
La viróloga y académica de la Facultad de Medicina de la U. de Chile, Vivian Luchsinger, admite que no es un análisis fácil y que se debe hacer tanto desde el punto de vista virológico, como social. “En mi opinión hay dos aspectos, uno es que virológicamente lo encuentro muy arriesgado. Pero desde el punto de vista social y mental es beneficioso”. La especialista indica, además, que “hay una contraposición, porque virológicamente el virus está circulando, tenemos una variante Delta, y no tenemos una inmunización comunitaria, por lo que obviamente es riesgosa la relajación de las medidas”.
Por su parte, la académica de la Escuela de Salud Pública de la Casa de Bello, María Soledad Martínez, manifestó su sorpresa ante los anuncios realizados por el Gobierno, dado el contexto en el que actualmente se encuentra el país. Sobre la posibilidad de aumentar los aforos en recintos donde las personas cuenten con su pase de movilidad, ya que han cumplido con su esquema de vacunación, la experta asegura que “a mí me parece imprudente, me parece muy imprudente avanzar los aforos (…) Me preocupa, por ejemplo, que ya en fase 2 se puede estar en restoranes y gimnasios cerrados por la gente vacunada, por supuesto, porque son actividades de alto riesgo, entonces, es complicado”.
En conversación con Radio Cooperativa, la infectóloga y académica de la Facultad de Medicina,Claudia Cortes, planteó que otro de los aspectos a considerar es la baja fiscalización que se ha visto en las últimas semanas y que podría profundizarse aún más a futuro. “Mi temor de que la modificación del Paso a Paso es que quedemos igual, porque ¿va a haber capacidad de fiscalización o voluntad de fiscalizar el uso de este carnet de movilidad, y se fiscalice que efectivamente las personas estén realizando las actividades con este carnet al día?, porque eso no ha ocurrido”.
Asimismo, consultada sobre qué medida es adecuada y cuál no, la especialista dijo que “estimular la vacunación. Esa es la medida más adecuada porque eso es lo más importante que tenemos que hacer”. Sobre lo menos positivo, dijo que “basarnos en que muchas actividades dependen de la verificación de un carnet de movilidad, y yo puedo apostar que no se va a verificar”, sentenció.
“En ningún caso están las condiciones sanitarias para pensar en una nueva apertura”, asegura el Dr. Cristián Rebolledo, académico Escuela de Salud Pública de la U. de Chile. Además, comentó que centrándose particularmente en estas distintas aperturas, “a mí me parece que el Pase de Movilidad pudiese dar mayor facilidad para el desplazamiento para la actividad al aire libre, pero no necesariamente pudiese vincularse esto con actividades cerradas como se está proponiendo”.
Apertura de establecimientos educacionales
Deben recibir apoyo los colegios y escuelas que no cuenten con implementos para asegurar su correcto desempeño y brinden seguridad a las familias. Así lo plantea la profesora Vivian Luchsinger. La viróloga sostiene que “uno esperaría que los colegios particulares asuman el costo y que puedan hacerlo, pero a otro tipo de colegios tienen que darles los implementos. Eso significa medidas como mascarillas para todos, la implementación en los lugares de alcohol gel, etc. Eso tiene que ser solventado por el gobierno en los lugares de educación que son públicos o subvencionados”.
En la misma línea, la profesora Soledad Martínez, afirma que, en su opinión, “está bien que sean las últimas en cerrar y las primeras en abrir, pero también eso significa darles a las escuelas las capacidades de proteger a sus niños, entonces, de darles mascarillas KN95, de tener sistemas de ventilación que permitan filtrar el virus. Si no, es puro voluntarismo no más”.
Maritza Tapia, periodista Prensa U. de Chile. Fotos: Felipe Poga.