El uso de la madera se ha diversificado en la construcción se siguen investigando nuevos usos por su bajo impacto al equilibrio ambiental.
Si se maneja de manera adecuada como recurso, la madera es un material clave para disminuir la generación de gases de efecto invernadero. ¿Cuáles son sus ventajas?
Carolina Fonseca, directora de la carrera de Arquitectura de la sede De la Patagonia señala que “en tanto sea un proceso tecnificado y sus etapas debidamente controladas, la madera supera al acero y al hormigón en cuanto a su menor huella de carbono. La tecnología de la madera podría avanzar a tal punto de que podremos tener un material de ciclo de vida cerrado e incluso que pueda ser reutilizable y reciclable”.
La académica precisa que la construcción es el segundo sector industrial que más genera residuos en el planeta y “su proceso de extracción de materias primas tiene un alto impacto en el medio ambiente. Se trata de materiales pétreos y minerales que constituyen la materia prima para la fabricación del acero, el hormigón y cerámicos, cuya extracción implica deforestación, generación de polvos y material particulado que afecta la calidad del aire y favorecen el calentamiento global”.
Lo relevante es que siempre se construya con madera de bosques de plantación certificados, porque de esa manera está garantizada la posibilidad de generar un ciclo de vida cerrado, sin afectar especies nativas y con una construcción más sustentable
Respecto al comportamiento estructural de la madera, la arquitecta explica que las maderas tienen distintos grados de dureza que están relacionadas con su tiempo de crecimiento
En Chile, dice la académica, “la madera que más se utiliza es el pino, que es una planta conífera de rápido crecimiento y también de rápida recuperación. Entonces, maderas de mediana densidad como el pino y otras coníferas, como se ha demostrado, pueden ser utilizadas perfectamente para la construcción con buen comportamiento térmico y mediante prefabricación como en el caso de la madera masiva contra laminada CLT”.
Carolina Fonseca resalta además que la madera se puede desarrollar a través de sistemas constructivos prefabricados y eso significa que “también se puede reducir el impacto ambiental del proceso y acelerar la construcción junto con el favorecimiento en el comportamiento climático del edificio mediante el uso de la madera. Adicionalmente, el ser humano se siente más confortable en espacios con materialidades orgánicas como la madera”.