Avanzar hacia la implementación de los principios de la ciencia abierta en toda la Universidad es el objetivo del proyecto adjudicado por nuestro plantel en el “Concurso de Desarrollo de Capacidades Institucionales para gestionar el conocimiento de Información Científica”, de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID). La iniciativa busca generar un cambio cultural que permita desarrollar una investigación más encontrable, accesible, interoperable y reutilizable.
Un financiamiento por $200 millones de pesos obtuvo nuestro plantel para desarrollar el proyecto “Hacia el cambio cultural en la Universidad de Chile sobre Ciencia Abierta”, una propuesta presentada a la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) desarrollada en conjunto por la Vicerrectoría de Tecnologías de la Información (VTI), la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VID) y la Dirección de Servicios de Información y Bibliotecas (SISIB). La iniciativa busca generar un cambio cultural que permita fortalecer una producción científica más encontrable, accesible, interoperable y reutilizable.
Lucía Moreno, directora de Datos de la VTI y quien lidera el proyecto, destacó que el trabajo en equipo permitió obtener 4,32 puntos de un total de 5 y conseguir el máximo presupuesto asignado para cada iniciativa. “Creemos que es posible avanzar en un cambio institucional que nos permita administrar y gobernar los datos de ciencia abierta”, comentó sobre este proyecto que tendrá un plazo de ejecución por dos años.
Junto a lo anterior, la propuesta especifica que se trabajará en la proposición de una institucionalidad estratégica de gobierno de datos y publicaciones; además de evaluar y fortalecer aplicaciones que permitan mejorar la interoperabilidad de integración de estas plataformas para el manejo de datos internos, datos de investigación y publicaciones en la institución, a través de metadatos.
En la Universidad existen investigadores e investigadoras que desarrollan numerosos proyectos en cada una de sus 14 facultades, 5 institutos interdisciplinarios y Hospital Clínico, los que poseen autonomía y descentralización en su gestión. Lo anterior, implica un esfuerzo de coordinación importante, especialmente porque al interior de estas unidades se desarrolla una amplia variedad de disciplinas que generan una alta heterogeneidad en la producción de conocimiento.
Por otra parte, hay que considerar que actualmente los sistema de evaluación de proyectos y de la carrera académica se basan casi exclusivamente en investigación liderada y no en la colaboración ni en la transdisciplina, algo que sin duda implica cambios mayores en la Universidad y en el sistema nacional de ciencia, tecnología, innovación y conocimiento, puntualiza Leonardo Reyes, jefe de la Unidad de Estudios e Indicadores de la VID.
La iniciativa también implica capacitar y formar a los integrantes de la comunidad universitaria para la ciencia abierta, así como comunicar y difundir el trabajo que se está realizando. En este aspecto, “es relevante que las bibliotecas integren servicios de apoyo a la investigación y que se formen recursos humanos que permitan orientar sobre gestión de datos, repositorios, uso de metadatos, identificadores digitales, entre otras tareas”, enfatiza Rodrigo Donoso, director de SISIB.
Comunicaciones VTI