Publicado por Constanza Saavedra Ortega UCSC
Investigación analizó hábitos de consumo en menores del Gran Concepción, donde a más bajo el nivel socioeconómico del colegio, mayor es la cantidad de horas ante la pantalla.
A través de encuestas aplicadas a 314 niños de colegios particulares, subvencionados y municipales del Gran Concepción, el estudio “Los niños capturados por la pantalla: El boom de la red social YouTube en el consumo televisivo infantil” (disponible aquí) buscó analizar los hábitos de consumo de la plataforma YouTube en niños de 10 y 11 años.
La investigación que realizó el académico de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales de la UCSC, Dr. Fernando Fuente-Alba, junto al periodista Luciano Veloso, contempló aspectos como horas de consumo, horario, programación, preferencias y diferencias por género y situación socioeconómica, además del tipo de dispositivo para acceder a los contenidos.
Entre los hallazgos destaca que casi la totalidad de los menores analizados utiliza la plataforma (sólo uno de los 314 encuestados negó usarla) y que mientras más bajo es el nivel socioeconómico del colegio al que asisten, mayor es la cantidad de horas en la pantalla.
“Falta de control parental y una televisión abierta con escasa oferta infantil están entre las causas identificadas por el estudio. Ello, sumado a un algoritmo de programación antes de terminar un video ya ofrece al pequeño cinco o seis videos similares, convierten a YouTube en una fórmula audiovisual que puede tener ‘capturados’ por horas a los niños frente a una pantalla de celular o computador. Una televisión abierta casi sin programación infantil y la proliferación de teléfonos multimedia en manos de niños cada vez más pequeños, han llevado a las plataformas de video streaming, y en particular a YouTube, a un alza exponencial durante los últimos años”, explicó el Dr. Fernando Fuente-Alba.
De acuerdo al investigador, este comportamiento no estaría libre de riesgos: “creemos que los niños pasan horas frente a las pantallas, muchas veces inducidos por la comodidad parental que prefiere ignorar la situación. Al margen de la vulnerabilidad psicológica previa, el abuso de pantallas puede provocar una pérdida de habilidades en el intercambio personal y desembocar en una especie de analfabetismo relacional, facilitando la construcción de relaciones sociales ficticias”.
Riesgo
El estudio enfatiza en que los niños pasan demasiado tiempo frente a la pantalla multimedia, siendo permeables a contenidos exhibidos sin supervisión adulta. Como ejemplo de ello, siete de cada diez encuestados reconoce que ingresa todos los días a Internet, navegando mayoritariamente entre una y dos horas diarias.
“Estas cifras, si se analizan bajo el prisma del nivel socioeconómico, resultan alarmantes, pues a medida que el establecimiento es representativo de un menor nivel socioeconómico, como en el caso de los colegios municipales, las horas de navegación en YouTube tienden a aumentar paulatinamente, llegando a promediar entre seis y ocho horas diarias, incluso mientras está en el colegio. En los establecimientos particulares este fenómeno tiende a disminuir, lo que podría indicar un mayor control o un mayor tiempo destinado a tareas o a actividades extra programáticas de los pequeños”, explicó el académico de la UCSC.
En cuanto a la justificación ante el excesivo uso de la plataforma, la principal motivación señalada en el estudio es la diversión que encuentran en los contenidos, con un 80%; seguido del “no encuentro contenido en la televisión que me divierta”, con un 43%; dejando en tercer lugar al hecho que “existen series en YouTube que no se encuentran en la televisión abierta o de cable”, con un 42%.
Respecto del uso de las pantallas, la investigación plantea la conveniencia de cambiar pantalla por pantalla, es decir, la del teléfono por la del televisor, “la ventaja sería que el control parental podría ser más operativo en el caso de televisor, pues los padres podrían ver fácilmente qué está viendo el pequeño o bloquear algún tipo de contenido”.
Para el Dr. Fernando Fuente-Alba, a la luz de los resultados de esta investigación, y en voz de los propios niños, más del 50% de sus padres ignoran lo que ellos ven en Internet, “esto se agudiza a medida que baja el nivel socioeconómico del pequeño, es decir los niños y niñas de colegios municipales son menos controlados que los de colegios particulares respecto a lo que ven y al tiempo que están conectados. Esto coloca a los pequeños, según expertos, a un paso de una posible adicción, pues lo ideal es que no sean más de 1,5 a 2 horas diarias el tiempo de exposición a estas tecnologías”.