Se trata de iniciativas de los académicos Dres. Carlos LeQuesne y Eduardo Silva, ambos del Instituto de Conservación, Biodiversidad y Territorio de la Facultad de Ciencias Forestales Recursos Naturales de la UACh.
Fueron 27 las iniciativas Fondecyt regular adjudicadas por la Universidad Austral de Chile, resultado que fue informado durante este mes de enero por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), y donde destacan dos proyectos de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales.
Detección de anillos de congelamiento
Uno de los proyectos es “Evolution of Late Frost Risk in Central Chile: 500 years of Variability and Changes”, el cual estará a cargo del Dr. Carlos LeQuesne, académico del Instituto de Conservación, Biodiversidad y Territorio.
“Lo que buscamos con el proyecto es desarrollar una red de cronologías de anillos de congelamiento utilizando dos especies nativas: ciprés de la cordillera y araucaria. En este caso, estamos enfocados al registro y detección de marcas o anillos de congelamiento. Estos anillos de congelamiento se producen en los ejemplares jóvenes, tanto de ciprés de la cordillera como de araucaria que han sido expuestos a muy bajas temperaturas, aproximadamente 8°C bajo cero durante la primavera, que es el periodo en que comienzan a crecer”, explicó.
Los árboles jóvenes que habitan lugares en altura en la cordillera están más expuestos y son sensibles a estas heladas tardías, que corresponden a periodos fríos en primavera. Es así como en sus anillos de crecimiento estos eventos quedan marcados. “Como todas las plantas leñosas, los árboles inician su periodo de crecimiento en primavera, pero al enfrentar las bajas temperaturas éste se detiene y las células quedan con anomalías. Este traumatismo permanece marcado como un registro dentro de la anatomía de la madera. En base a esto podremos hacer un registro hacia el pasado”, señaló el Dr. LeQuesne.
El estudio se basa en las investigaciones que durante años ha realizado el Laboratorio de Dendrocronología y Cambio Global de la UACh, sin embargo, dichos estudios se enfocaban en la búsqueda de los árboles más viejos para lograr un registro antiguo de las sequías o reconstruir el clima En este caso, en cambio, el enfoque está en los individuos más jóvenes, que son los más sensibles a registrar esos eventos de congelamiento.
La construcción de la red de señales de congelamiento es algo novedoso en Chile y muy útil para aplicarlo en la agricultura. En países como Canadá y Argentina lo han estudiado por décadas.
“Significa estudiar por un lado lo ambiental, cuáles son los factores que están detrás para entender qué elementos se presentan cuando estos eventos ocurren; y, por otro lado, estudiar espacialmente cuán importante fueron estos fenómenos, si afectaron más al norte, o solo al sur y su frecuencia”, indicó.
Carnívoros silvestres en la ciudad
“¿Qué impulsa el uso de áreas urbanas por parte de carnívoros silvestres? Testeando la hipótesis de la competencia por interferencia”, es el proyecto adjudicado por el Dr. Eduardo Silva, académico de la misma Facultad.
“El objetivo del proyecto es determinar qué factores favorecen la presencia de carnívoros en zonas urbanas y periurbanas del sur de Chile. Este estudio se desarrollará en Valdivia, Osorno y Puerto Montt, considerando tanto las zonas urbanas como periurbanas y rurales adyacentes”, explicó el académico.
De acuerdo con lo señalado por el Dr. Silva, los registros de carnívoros en áreas urbanas son frecuentemente considerados una novedad porque se asume que estos animales no viven en ciudades. “Sin embargo, carnívoros tales como zorros y mapaches son muy comunes en áreas urbanas del mundo desarrollado, alcanzando densidades que a veces pueden ser bastante altas. Por tanto, en este proyecto nos movemos de la pregunta “¿qué hace un carnívoro en la ciudad?” a “¿por qué los carnívoros no son comunes en las zonas urbanas?”, agregó.
Durante la pandemia se habló mucho en medios de comunicación sobre avistamientos de animales en las ciudades. Para el académico, este aumento de casos se debió quizás a que en ese periodo se le prestó mayor atención a la presencia de fauna silvestre en estas zonas. Llamaron la atención, tanto a nivel nacional como internacional, casos de pumas en la ciudad, lo cual influyó en el esfuerzo por detectar animales silvestres. “Nuestro equipo de trabajo nunca había muestreado en la ciudad, pero durante la pandemia instalamos cámaras trampas que nos permitieron detectar zorros chillas y culpeos, güiñas, huillín y hasta pudú en Valdivia. Sin embargo, al menos los zorros chilla habitan la zona urbana de Valdivia hace años y a la fecha, no han sido estudiados”, comentó.
El experto indicó que “en ocasiones estos animales son capturados y translocados porque se asume que no deberían estar en la ciudad. Sin embargo, si los carnívoros usan áreas urbanas, los protocolos de translocación deben estar sujetos a una revisión importante, especialmente considerando que el éxito de las translocaciones es bajo. En segundo lugar, mediante la evaluación de los efectos no letales de los perros, determinaremos la compatibilidad de pasear perros con la presencia de carnívoros en los parques urbanos. Esto es importante porque las áreas naturales, como el Arboretum, se utilizan cada vez más como áreas para pasear perros”.
Finalmente, el Dr. Silva indicó que este proyecto cuenta con un objetivo adicional, que apunta a transferir el conocimiento generado y construir capacidades, con estándares internacionales, entre los actores locales para el monitoreo de fauna en zonas urbanas, donde se espera transformar a Valdivia en la primera ciudad a nivel nacional con monitoreo de carnívoros urbanos.
Para conocer el resto de las iniciativas seleccionadas ingresar a este enlace https://diario.uach.cl/con-27-iniciativas-fondecyt-regular-seleccionadas-para-adjudicacion-uach-confirma-su-liderazgo-cientifico-en-chile/