Durante la ceremonia de entrega, el documento fue comentado por Eduardo Engel y Alejandro Barros, académicos y directores del Centro de Estudios Espacio Público. Se trata de un trabajo que aborda la importancia de definir un modelo de administración de datos y presenta un análisis detallado del caso de Chile y de experiencias de otras latitudes. En cuanto a las alternativas de gobernanza, propone dos posibles modelos: uno descentralizado y otro centralizado.
El día a día de la sociedad está marcado por la capacidad y frecuencia con que se generan, voluntaria o involuntariamente, una incalculable cantidad de datos. Según explican los involucrados, esta fue una de las razones que motivó la creación en julio del 2021 de la Comisión Asesora de Datos de Interés Público del Ministerio de Ciencia, un grupo de asesoría científica que esta semana culminó una de sus principales tareas: la elaboración del informe “Datos de interés público para informar, tomar decisiones y crear conocimiento: Lineamientos para una gobernanza”.
En una nueva sesión de la Comisión, desarrollada en las dependencias del MinCiencia, la comisión entregó el documento al ministro Andrés Couve. En la publicación se entrega un diagnóstico y alternativas de gobernanza para permitir una efectiva, eficiente y ética utilización de los datos. El ministro agradeció la labor de la instancia y valoró los aportes y las recomendaciones contenidas en el reporte.
“Diseñar e implementar una gobernanza de datos de interés público es un paso importante e innovador para el Estado. Aquí no se recomiendan necesariamente soluciones únicas, sino escenarios y formas de abordarlos que esperamos aporten a discusiones más amplias. Queremos que este planteamiento sea un detonante para esas discusiones tan necesarias para abordar uno de los desafíos centrales que tenemos como país para incorporarnos de lleno a la revolución tecnológica”, manifestó Couve.
Durante la ceremonia de entrega, el documento fue comentado por Eduardo Engel, académico U.Chile y director del Centro de Estudios Espacio Público, y por Alejandro Barros, consultor senior del Centro de Sistemas Públicos y también director de Espacio Público. “Este es un gran aporte para tener un modelo de gobernanza de datos, algo que hoy no existe en Chile. Esto está vinculado con la Ley de Transformación Digital, que tiene como uno de sus pilares fundamentales la dimensión de políticas públicas basadas en evidencias, para la cual se requieren datos. Por lo tanto, este esfuerzo, alineado con nuestra política de transformación digital, es un muy buen aporte para poder lograrlo”, aseguró Barros.
“El manejo del COVID-19 ha sido un gran desafío, pero todo hubiese sido mucho más difícil sin el importante rol que jugó el Ministerio de Ciencia en el manejo de datos. Este documento permite entender lo que se ha avanzado en Chile en la materia, y también los desafíos que tenemos a futuro para poder hacerlo mejor en las próximas pandemias y en otros temas que no tienen que ver con la salud, pero que son igual de relevantes para la política pública”, agregó por su parte Eduardo Engel, académico U.Chile y director de Espacio Público.
En concreto, el informe explica por qué es importante definir un modelo de administración de datos; realiza un análisis detallado del caso de Chile, y compara experiencias de diversas latitudes del mundo. En cuanto a las alternativas de gobernanza propuestas, se detallan dos posibles modelos: uno descentralizado (en que la administración de los datos está distribuido en diferentes instituciones), y otro centralizado (en sólo una). Para ambos casos, el informe recalca la necesidad de profundizar en valores como los estándares de acceso y formato, el compromiso de las autoridades y la sociedad civil, una necesaria “conversación” con los datos de otros países, y la permanente actualización y evolución de la agenda para adecuarse a los avances tecnológicos.
“El documento tiene la virtud de sumar reflexiones de científicos que han aplicado ciencia de datos en Chile. Es, además, un documento que puede ser considerado preliminar y, sobre todo, una provocación para seguir discutiendo sobre los datos para la ciencia en el país”, dijo Alejandro Maass, investigador del Departamento de Ingeniería Matemática, Centro de Modelamiento Matemático y Centro para la Regulación del Genoma de la Universidad de Chile-CNRS e integrante de la Comisión Asesora.
“La integración de datos de manera segura es indispensable para tener un Estado al servicio de las personas y para saber si las políticas públicas funcionan”, añadió la directora del GobLab de la Universidad Adolfo Ibáñez y también integrante del grupo, María Paz Hermosilla.
Otro integrante de la Comisión es el director del Centro BASAL Ciencia & Vida y de la Fundación Ciencia para la Vida y profesor titular de la Facultad de Ingeniería y Tecnología de la Universidad San Sebastián, Tomás Pérez-Acle, quien aseguró: “Lo que intentamos es poner no sólo en valor los datos y la relevancia que tienen para el futuro del país y las próximas generaciones, sino también lo que significa contar con algún modelo de gobernanza de datos, que es la serie de elementos que entran en juego desde el momento en que somos capaces de tomar los datos desde su producción, les damos valor, los almacenamos para el futuro, nos preocupamos de que estén almacenados de la manera adecuada y que se mantengan en el tiempo, y, por sobre todo, de los elementos que están relacionados con las entidades tanto estatales, privadas y la ciudadanía, que deben ser quienes tengan acceso a los datos para generar el valor”.
En tanto, la directora del Instituto Data Science de la Facultad de Ingeniería de la Universidad del Desarrollo, Loreto Bravo, destacó que “es emocionante estar cerrando este trabajo, que lleva dos años en distintas comisiones. Estamos terminando con la liberación de un documento, que en el fondo, nos guía respecto a las posibles formas que tenemos de gestionar los datos públicos en Chile”.
“Los ‘Lineamientos Gobernanza de Datos’ nos encomiendan a profundizar y diversificar competencias, creando comportamientos, hábitos y buenas prácticas que solidifican confianzas y nuevos consensos culturales”, dijo por su parte Steffen Härtel, investigador del Instituto de Neurociencia Biomédica y presidente del Comité Académico del Centro Nacional en Sistemas de Información en Salud de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile
Pablo Marquet, profesor titular del Departamento de Ecología de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Católica e investigador del Instituto de Ecología y Biodiversidad, del Centro de Cambio Global UC, del Centro de Modelamiento Matemático y del Instituto de Sistemas Complejos de Valparaíso, valoró que “el progreso de la ciencia y la sociedad depende de la existencia de una buena gobernanza de datos que estimule la generación, uso y análisis de éstos por parte de los grupos de interés contribuyendo a la transparencia del estado y sus decisiones. En esto el país debe avanzar en forma decidida”.
Para Leonardo Basso, director del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, “lo más relevante del trabajo que hicimos es que agrega una nueva dimensión a la importancia de los datos, que va más allá de la transformación digital y de los datos para mejor gestión, sino que va a la importancia del dato en la creación del conocimiento y el uso de ese conocimiento en innovación para mejorar el bienestar de la sociedad chilena”.
Además, la seremi de Ciencia de la Macrozona Centro, María José Escobar celebró que “disponibilizar datos de interés público no tan solo permitirá fortalecer la generación de conocimiento, sino que presenta una tremenda oportunidad para el desarrollo y despliegue de emprendimientos basados en inteligencia artificial y ciencia de datos”.
Para Demián Arancibia, jefe de la Oficina Futuro MinCiencia, “el país tiene una trayectoria de reflexiones y recomendaciones expertas enfocadas en gobierno abierto y modernización del estado o transformación digital. Este documento aporta a esa visión con elementos que surgen desde la cultura científica, en que los datos son un activo para informar, tomar decisiones y crear conocimiento. ¿Por qué un funcionario público o una autoridad debería preocuparse de esto? Porque es de interés público y aporta al bien común, hace más eficiente la gestión pública y contribuye a las políticas basadas en evidencia (objetivos primarios de las trayectorias mencionadas), pero además fomenta el fenómeno colectivo de crear conocimiento y sus aplicaciones prácticas a desafíos fundamentales de vida o muerte, como una pandemia, el cambio climático o la economía y la cohesión social”.
La Comisión Asesora de Datos de Interés Públicos forma parte de la agenda de datos liderada por el Ministerio, que cuenta con otras iniciativas internacionalmente reconocidas como la Base de Datos Covid-19, el Observatorio de Cambio Climático, la Plataforma Observa, entre otras.
Revisa aquí el acceso centralizado a las iniciativas de datos que se aluden en el documento.