El Alerce milenario de más de 5.000 años que habita en el Parque Nacional Alerce Costero en la Región de Los Ríos, posiblemente sea el árbol vivo más longevo del planeta, y su historia volverá a tomar fuerza esta semana gracias a una acción de arte y ciencia que será presentada en Ars Electrónica, el festival de ideas en torno a las artes, la ciencia y la tecnología más importante del mundo.
El proyecto, llamado “LAÑILAWAL”, que llevará al alerce milenario chileno al reconocido festival austriaco, consiste en la instalación de un video a gran escala y una serie de en pantallas en pequeño formato que intenta representar el paso del tiempo de un ser vivo milenario, y mostrar lo invisible del transcurso del tiempo. En la propuesta que estará en exhibición desde el 7 al 11 de septiembre en Linz, Austria, participan profesionales de la Universidad Austral de Chile, artistas y científicos, egresados y agentes culturales.
La idea creativa y la curatoría es una colaboración entre el científico y ex estudiante UACh Jonathan Barichivich Henríquez (CNRS, Francia); Jesús Román Carreño, Directora del MAC UACh e Ivan Flores, director del Instituto de Artes Visuales UACh. La dirección y producción del video fue un trabajo en conjunto entre Jesús Román e Ivan Flores, lo que implicó hacer varios viajes al Parque Nacional Alerce Costero. La asistencia de cámara fue de Cristian Arriagada, más la música original de Alejandro Albornoz (UACh). La visualización de datos estuvo a cargo de Claudio Lavados y se contó con la colaboración especial de Elisa Figueroa, directora de Galería Barrios Bajos.
Fueron los científicos chilenos Jonathan Barichivich y Antonio Lara, quienes abrieron la puerta a la pregunta de si un alerce del sur de Sudamérica es el árbol viviente más longevo de nuestro planeta.“Este árbol del sur de Chile es un mensajero del tiempo –explica Barichivich- y ha habido muchos de estos mensajeros vegetales, pero la mayoría murieron en el camino. Quizá nosotros con el conocimiento que tenemos no podremos descifrar el mensaje que lleva el alerce milenario de la Región de Los Ríos, pero nuestro rol es protegerlo”, señala convencido. También subraya que este encuentro de saberes y visiones entre arte y ciencia le ha dado energía para seguir en una “lucha familiar” que está enraizada en su historia de vida y tres generaciones de protección a los alerces.
Como investigador, Barichivich junto a su familia han colectado por años la información científica del árbol. “La respiración del ecosistema en torno al árbol, la micro-meteorología cada 15 minutos, la temperatura, la humedad, es lo que hemos tratado de visualizar en esta esta acción de arte y ciencia, como el pulso del árbol viviente. Tratamos de llevar a los humanos a la escala de tiempo del árbol. Esto ha sido fantástico porque hemos podido animar imágenes y representar por primera vez el concepto de ese pulso”, relata Barichivich. “El arte es una herramienta súper poderosa para comunicar los valores más allá de la ciencia que tiene un ser tan especial y longevo como es nuestro alerce milenario, cuyo verdadero nombre se ha revelado como Lañilawal”, señala el investigador.
El alerce milenario está en el Parque Nacional Alerce Costero, por lo que su cuidado y administración es responsabilidad de la Corporación Nacional Forestal, quienes han apoyado este trabajo de rescate patrimonial y nuevas narrativas entre arte y ciencia. El Director nacional de Conaf, Christian Little, dice que llevar esta historia a un espacio como Ars Electronica contribuye mucho a los esfuerzos de protección de esta especie milenaria. “Conozco de cerca el trabajo científico de Jonathan y de su profesor Antonio Lara, así como el peso específico que cada uno tiene en la historia de protección del alerce. Por eso apoyamos estas acciones de alto vuelo que ayudan a amplificar el mensaje de urgencia de proteger este árbol patrimonial”, señala.
Para la Dra. Marcela Hurtado, Directora de Creación Artística de la Universidad Austral de Chile, “esto es grande”, considerando la consistencia con la que creadores e investigadores de la UACh han participado de este evento por tres años consecutivos. “Ars Electronica es la primera división a nivel mundial, por la exigencia curatorial, la trayectoria y la vanguardia reunida en un solo lugar”, sostiene. “Esto es otra muestra del alto estándar de la comunidad de creadores artísticos de la Universidad y es expresión del proceso creciente de internacionalización que se impulsa y acompaña desde la Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo y Creación Artística (VIDCA-UACh)”, agrega Hurtado.