Fuente: Greenpeace
A lo largo de su historia, en la laguna Aculeo se han podido identificar 102 especies de aves habitando en su ecosistema. Y el 2018, con la desaparición de su espejo de agua, las especies que quedaban fueron sentenciadas a migrar.
Hoy Aculeo ha vuelto a tener agua y cumple funciones primordiales, para las aves residentes y para aquellas migratorias, las que están volviendo al lugar y que pueden encontrar en este sitio sectores de alimentación, de refugio, de reproducción y de descanso.
En el último censo de aves, realizado en marzo de este año por la Reserva Natural Altos de Cantillana (IG @altosdecantillana) junto a Biodiversidad Chilena (IG @biodiversidad_chilena) y Greenpeace, se pudieron avistar nuevas especies. Los últimos registros censados arrojan como resultado que un total de 70 especies de aves han regresado al humedal. Esto representa casi el 70% del total registrado históricamente.
“Un ecosistema con mayor biodiversidad es más resiliente, es decir, un humedal que presenta más especies y tipos de vida diferentes tiene más posibilidades de sobreponerse a situaciones adversas. Si logramos la protección de la laguna, también estaremos propiciando el retorno de las especies a la Laguna de Aculeo. En palabras simples, estaremos fortaleciendo su capacidad de regeneración”, explica, Dominique Charlin, especialista en biodiversidad de Greenpeace.
De ahí, que el llamado de Greenpeace es a recuperar la naturaleza de Aculeo y la invitación es a sumarse firmando en www.aculeohumedal.cl
Estas 3 aves representan algunas de las reapariciones de especies en Aculeo :
Cuervo del pantano (Plegadis chihi)
Ave en categoría de conservación casi amenazada (NT). Tiene un pico curvado, muy característico, y su cabeza, cuello y toda la parte inferior tiene una coloración castaño púrpura brillante, de dorso con reflejos metálicos. Su ala y cola pardos con reflejos verde iridiscente se lleva casi todas las miradas en los humedales. Se alimenta en la zona pantanosa que se da en la orilla de la laguna y se alimenta de lombrices, insectos e incluso algunos anfibios pequeños.
Las hembras generalmente ponen los huevos (azul opaco) al mismo tiempo, entre diciembre y enero, por lo que el nacimiento de sus crías está sincronizado.
Sus nidos los hacen arriba de los juncos, entre 1- 1,5 mts del suelo, para protegerse de los depredadores. Aunque en otras localidades es una especie abundante, en nuestro país avistarla no es tan común, y es que sus hábitat predilectos están desapareciendo por la disminución de la humedad.
Playero de Baird (Calidris bairdii
Pequeña ave que mide entre 14 a 18 cm y no pesa más de 60 gr. Esta especie es un ave migratoria que viaja miles de kilómetros desde el ártico (donde anida) hasta nuestro país. Consume larvas de insecto así que, en sus avistamientos, probablemente se le encuentra forrajeando a las orillas de los humedales o playas.
Esta impresionante ave nidifica en nidos que no son más que un pequeño hoyito forrado con pasto o líquenes y luego emprende vuelo hasta nuestro Chile en la temporada más cálida del hemisferio sur, desde agosto hasta abril, en este inmenso viaje que emprende, va parando en distintos humedales y costas para recargar fuerzas, alimentarse y encontrar refugio.
Nuco (Asio flammeus suinda)
Búho de tamaño mediano que llega a medir 43 cm de largo y a pesar 450 gr. Sus imponentes ojos amarillos y su conducta diferente a otros búhos lo hace muy especial. Todos tenemos la idea de que los búhos son nocturnos y viven en árboles grandes en los bosques , pero esta especie es de carácter más bien diurno y habita en pastizales asociados a lagunas o lagos.
Se puede observar en el día posado en el suelo, entre las totoras o en algún poste del cercado predial. Su principal alimentación son los roedores por lo que es un gran aporte en el control de plagas.