Durante la III Jornada de Morfología Aplicada, organizada por la Facultad de Medicina y Ciencia de la Universidad San Sebastián, expertos discutieron sobre cómo la comprensión anatómica y los cuidados preventivos pueden mitigar los efectos del envejecimiento, destacando la importancia de acudir a especialistas certificados para evitar riesgos asociados a tratamientos estéticos.
Factores como la exposición al sol, el tabaquismo y la falta de hidratación pueden acelerar el envejecimiento, proceso que comienza a los 20 años. Así lo planteó la odontóloga Andrea Riffo, especialista en Armonización Estética Facial, en la III Jornada de Morfología Aplicada, organizada por la Facultad de Medicina y Ciencia de la Universidad San Sebastián.
“Con los factores genéticos no podemos hacer nada, pero sí con los externos, como la exposición al sol, el tabaquismo, la vida sedentaria y la mala hidratación. Para no envejecer tan rápido debemos usar protector solar, no fumar, comer sano y beber mucha agua”, señaló la experta.
Además, subrayó que el conocimiento detallado de la anatomía es crucial para la armonización facial, ya que permite prevenir complicaciones y optimizar resultados. “No es lo mismo inyectar ácido hialurónico en una zona que en otra. Para obtener el mejor efecto, debemos saber específicamente dónde están los compartimentos adiposos y hacia dónde se moverán”.
“Las primeras zonas en mostrar signos de envejecimiento varían, pero comúnmente son la zona glabelar, las arrugas del enojo, las patas de gallo y la calidad general de la piel”, añadió.
La doctora Riffo destacó la importancia de cuidar la piel desde temprano, ya que una piel deshidratada y seca afecta cualquier tratamiento estético. Respecto a los músculos faciales, mencionó que con el envejecimiento se vuelven más hipertónicos, provocando arrugas estéticas como las frontales y periorbiculares. “La toxina botulínica, que es un miomodulador, ayuda a relajar temporalmente estos músculos, atenuando o eliminando las arrugas”.
Riesgos de cirugía
El doctor Jorge Rivera Arancibia, médico cirujano especialista en Medicina Estética y Regenerativa, también participó en la jornada. Subrayó la importancia del manejo adecuado del plano anatómico en las inyecciones. “La diferencia entre la inyección simple y la compleja radica en el manejo del plano anatómico. En un plano lejos de la arteria, la intervención es más simple, pero siempre hay riesgos, especialmente cuando estos están muy cerca del rostro”, explicó.
El doctor Rivera destacó que las técnicas modernas de armonización volumétrica y lifting temporal presentan riesgos significativos, como la necrosis en el cuero cabelludo o en la trayectoria de la arteria temporal superficial. “Son técnicas que ofrecen excelentes resultados, pero deben ser manejadas por expertos debido a sus altos riesgos”, afirmó.
El especialista también recomendó a los pacientes verificar que sus inyectores sean médicos u odontólogos certificados, ya que en Chile solo estos profesionales están habilitados por el Ministerio de Salud para realizar estos procedimientos. “Es crucial que los pacientes se aseguren de quién los está inyectando, ya que existe una banalización de la Medicina Estética y muchas complicaciones se deben a inyecciones realizadas por profesionales no capacitados”, advirtió.