La escasez de agua afecta a más de dos millones de personas en Chile, y para el año 2050, nuestro país vivirá un estrés hídrico extremadamente alto (WRI, 2015).
Bajo esos datos, Paulina Salazar y Bastián Pedreros, periodistas, decidieron hacer algo al respecto, y con el apoyo de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), emprendieron un viaje a siete localidades de las regiones de Ñuble y del Biobío, para conocer en profundidad qué significa vivir sin el agua garantizada, y documentarlo.
“Gracias a esa oportunidad, pudimos identificar una problemática: la baja participación de la comunidad en la gestión del agua. Y a partir de eso, proponer una solución. Esa solución se llama Cuenco, un emprendimiento social cuyo propósito es impulsar la participación de las comunidades locales en la gestión hídrica, mediante la educación y la vinculación territorial”, explicó Bastián Pedreros, cofundador de Cuenco.
Recientemente, Cuenco realizó su lanzamiento en el Cowork de Innovación UCSC con el evento “Innovación contra la sequía”. La actividad, contó con la participación de destacados panelistas del sector hídrico local, además de la presencia de académicos, autoridades públicas, emprendedores, agentes de cambio y representantes de comunidades rurales.
“Fue una instancia valiosa de vinculación. Ahora, Cuenco se proyecta a visibilizar la situación hídrica del país desde una perspectiva participativa, incorporando a actores locales y abordando el tema con la sensibilidad necesaria”, mencionó Paulina Salazar, cofundadora de Cuenco.
Durante los próximos meses, el emprendimiento social buscará ejecutar programas de educación y vinculación territorial, y al mismo tiempo, visibilizar la situación hídrica del país a través de su sitio web www.cuenco.cl.