Giuliano Pastorelli
Director de Arquitectura
Universidad Andrés Bello, Concepción
La reciente crisis generada por los prolongados cortes de luz en la Región Metropolitana y que ha dejado a miles de clientes sin suministro eléctrico, pone de manifiesto la importancia de reconsiderar nuevas alternativas para enfrentar este tipo de emergencias energéticas. En este contexto, las llamadas energías renovables, a menudo asociadas a una visión ecológica o al bajo consumo, podrían ser una vía perfectamente posible.
Estas tecnologías tienen la capacidad de proporcionar independencia energética, lo cual es esencial en un escenario donde la red centralizada se encuentra comprometida. Al invertir en sistemas de energía renovable, las viviendas u otras construcciones pueden alcanzar un nivel de autonomía que les permite operar de manera independiente de la red eléctrica convencional, mitigando el impacto de apagones prolongados.
Los sistemas de energía renovable, como paneles fotovoltaicos y generadores eólicos, pueden actuar de manera similar a cómo actúan los generadores tradicionales, pero con beneficios adicionales. No solo ofrecen una alternativa a una fuente de energía única, sino que también aportan una solución limpia y segura.
Si usted no lo ha pensado, es hora de considerar las energías renovables como una inversión que no solo permitirá el ahorro en las cuentas de energía, sino que además como un sistema que le permitirá tener autonomía energética durante cortes o colapsos de gran escala.
En relación con lo recientemente acontecido, sería interesante pensar en una política pública que premie o entregue incentivos para quienes se atrevan a dar el primer paso. Es conveniente para todas las partes, sobre todo si tenemos en cuenta que este tipo de crisis climáticas parecen ser cada vez más recurrentes.