Esta innovadora tecnología, desarrollada por la Universidad del Bío-Bío, contó con el financiamiento entregado por la Agencia a través de sus instrumentos Fondecyt, Fondequip y Fondef.
Un avance para nuestro país, con potencial impacto a nivel internacional. Así calificaron las autoridades a la Casa Semilla, la primera vivienda impresa en 3D del país y de Latinoamérica, creada por el Grupo de Manufactura Aditiva de la Universidad del Bío-Bío.
La construcción fue desarrollada siguiendo los principios de economía circular y bajo la perspectiva de carbono-neutralidad, pero también considerando características sismorresistentes y térmicas, claves para ser instalada en cualquier rincón de Chile.
El prototipo, recientemente presentado, contó con el financiamiento de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, ANID a través de dos proyectos Fondequip, un Fondecyt Exploratorio, un Fondecyt Regular y un Fondef Investigación Tecnológica. La adjudicación de estos concursos por parte de la universidad y sus investigadoras e investigadores, permitió adquirir equipamiento; contribuir a la formación de capital humano avanzado; desarrollar investigación con la participación de profesionales nacionales e internacionales; junto con fomentar una activa colaboración público-privada para la transferencia de este conocimiento.
De este modo, en el desarrollo participaron estudiantes de pre y postgrado, quienes contribuyeron con sus trabajos de tesis, además de contar con la colaboración de empresas, como Cementos Bío Bío, SIKA-Chile, Tienda MK, Ventanas Tehmco y Revestimientos Isolcork.
Para la directora nacional de ANID, Alejandra Pizarro, la Casa Semilla es un ejemplo concreto de como la investigación realizada en las universidades puede generar lazos con la industria, con los que se alcanzan innovaciones de alto estándar. “Es tremendamente virtuoso, es lo que desde el Estado estamos propiciando. Celebro la capacidad que han tenido para vincularse y obtener un resultado como éste”, expresó.
Investigación de vanguardia regional
La Universidad del Bio-Bío ha impulsado la construcción aditiva a nivel latinoamericano y el desarrollo de la impresión 3D con hormigón. Esta iniciativa es liderada por los académicos de la Facultad de Arquitectura, Construcción y Diseño, Claudia Muñoz y Rodrigo García, contando además con el apoyo de investigadores y profesionales de la Facultad de Ingeniería de esta casa de estudios.
La institución dispone de una impresora industrial de gran escala Atenea-UBB, considerada la más avanzada de América Latina, a la que se suma el robot industrial KUKA KR120. Este equipamiento, financiado a través de proyectos Fondequip, ha permitido disponer de elementos impresos, como mobiliario urbano funcional, columnas y muros de escala real. En 2023 imprimieron una cabina de vigilancia con muros de 2.20 m de altura y mezclas cementicias optimizadas.
“Estos logros no fueron solo el resultado de la adquisición de equipamiento especializado, sino también de contar con los recursos necesarios para realizar investigación y alcanzar la madurez tecnológica para este desarrollo. Hace un año atrás estábamos en un TRL4 y hoy estamos pensando en un TRL7”, señaló la doctora Claudia Muñoz.
La construcción de la Casa Semilla es un hito relevante en el recorrido impulsado por la Universidad del Bio-Bío. Su rector, Benito Umaña, destacó que, tras años de investigación y trabajo interdisciplinario, hoy materializan esta iniciativa de vivienda desde la región del Biobío, “con tecnología de vanguardia a nivel nacional e internacional, dando cuenta que tenemos todas las capacidades para desarrollar este tipo de proyectos y aportar al desarrollo de la región y del país, pues podríamos contribuir a la reducción de las brechas de viviendaque hoy existen”.