La Corporación Nacional Forestal (Conaf), administradora de las áreas silvestres protegidas del Estado, recuerda que en la Región del Biobío estas unidades se mantienen cerradas al acceso público, debido a la situación epidemiológica del país derivada de la pandemia del COVID 19.
Al respecto, el director regional de Conaf, Francisco Pozo Alvarado, explicó que la medida, que a nivel nacional se adoptó por el Ministerio de Agricultura y la Corporación a mediados del mes de marzo, “tiene como objetivo frenar o minimizar el impacto del virus entre los guardaparques y los visitantes que llegan hasta las distintas reservas y parque de la región. Hablamos de un bien mayor que es la vida de las personas”.
Agregó que en las unidades se está trabajando con guardaparques de turno, “quienes se focalizan en patrullajes y labores de investigación, obviamente con toda su implementación de seguridad tal y como se establece en nuestro protocolo. De igual forma, el resto del personal de áreas silvestres se mantiene en modalidad de teletrabajo”.
El directivo manifestó, además, el país se encuentra en una situación que amerita la preocupación de todos, “actuando con la mayor responsabilidad en relación a seguir las medidas de precaución indicadas por la autoridad sanitaria”.
Las áreas silvestres presentes en el Biobío son el Parque Nacional Laguna del Laja, y las reservas nacionales Ralco, Nonguén, Altos de Pemehue e Isla Mocha.