Luego de 40 días en tratamiento y recuperación una lechuza, Tyto alba, fue liberada por funcionarios del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Mulchén, en su hábitat natural, en una zona de bosque nativo del sector Loncopangue, en la comuna de Quilaco.
“Una vez más vemos el compromiso de la ciudadanía con nuestra fauna silvestre. Este ejemplar fue encontrado por una familia de Mulchén, quienes se contactaron con nuestro Servicio, permitiendo que fuera evaluado por profesionales del SAG, determinándose su traslado al Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre de la Universidad de Concepción, sede Chillán, donde recibió los tratamientos adecuados para su recuperación”, destacó Iván Ramírez Delpín, Director Regional del SAG de Biobío.
Por su parte, Sofia Robbiano, encargada del Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre, indicó que el ave no podía volar y presentaba pérdida de atención al medio, realizándose exámenes, los que determinaron intoxicación con rodenticidas, aplicándose un tratamiento con vitamina K para fomentar la coagulación y complejo B para disminuir su anemia.
En este sentido, el directivo del SAG recordó que “la fauna silvestre tiene un rol fundamental en el equilibrio ecológico del medio ambiente y es benéfica para agricultura, por lo que es importante no mantener especies de aves y animales silvestres en cautiverio sin autorización del Servicio Agrícola y Ganadero”.
Asimismo, llamó a la ciudadanía a respetar la fauna silvestre y que en caso de avistamientos y que éstos no presenten alguna lesión o problema de movilidad “a no molestarlos y dejarlos que retornen de forma voluntaria a su hábitat, ya que la manipulación inadecuada y el cautiverio son un grave daño que se les provoca a estas especies”, dijo.
Esta especie se encuentra protegida por la Ley de Caza, por lo que su caza y captura está prohibida y es considerada beneficiosa para la actividad silvoagropecuario y para la mantención de los equilibrios naturales.