Incorporando entre sus investigadores principales a los académicos del Departamento de Sistemas Acuáticos de la Facultad de Ciencias Ambientales, Dr. Cristian Vargas, y Dr. Ricardo Barra, este último además director del Centro Eula, la Iniciativa Científica Milenio -del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación- confirmó la adjudicación del nuevo Instituto Milenio en Socio-Ecología Costera, SECOS.
Se trata de un proyecto que apunta a liderar la investigación en sistemas socio-ecológicos en ambientes costeros, buscando transitar hacia su sostenibilidad. Un estudio que abordará los impulsores de cambio, globales, regionales y locales, así como las trampas socio-ecológicas y soluciones para alcanzar la sustentabilidad.
Además de los doctores Vargas y Barra, el instituto contará con la participación de otros diez investigadores asociados, que liderarán las diferentes líneas de trabajo que estarán coordinadas por el Dr. Stefan Gelcich, del Departamento de Ecología de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Entre ellos, también estará la académica UdeC, Dra. Laura Farías, del Departamento de Oceanografía, que se sumará a científicos de las universidades, Católica del Norte, Andrés Bello, Santo Tomás, del Desarrollo, y Católica de la Santísima Concepción, que completan el total de ocho casas de estudio que participan en el proyecto.
El Dr. Cristian Vargas, quien posee amplia experiencia en el estudio de los ecosistemas marinos, el cambio global y la acidificación del océano, entre otros temas, valoró el logro detallando que “es muy importante ser parte de este nuevo instituto, único para el país al tratarse de un proyecto que combina disciplinas del área de las ciencias naturales, con las ciencias sociales. Acá nos encontraremos con profesionales oceanógrafos físicos o químicos, ecólogos, biólogos o genetistas, junto a personas que trabajan en áreas como economía, sociología o geografía, y en esa dinámica el gran desafío será encontrar cuáles son las bases para la sustentabilidad en la zona costera”.
El doctor en Oceanografía agregó, que hace mucho tiempo existía la necesidad de contar con un Instituto Milenio que abordara la zona costera con una mirada transdisciplinaria: “Este es un sistema complejo y con muchos conflictos, como la carretera hídrica, el desarrollo turístico y su infraestructura en la zona costera, la pesca artesanal, la acuicultura de peces o moluscos, las áreas de manejo, o la pesquería a pequeña escala. Entonces hay muchos usuarios en esta zona costera que se ven enfrentados a una gran cantidad de problemáticas, como el cambio climático, los estresores múltiples, los microplásticos o la liberación de tóxicos, como los piretroides. Entonces hay que trabajar en cómo hacemos que las diferentes actividades que desarrolla el hombre en la zona costera, puedan coexistir, pero asegurando su sustentabilidad en el tiempo, en un mundo bajo estresores locales y globales. Ese es el gran desafío, y nosotros como instituto creemos que la única forma de hacerlo es a través de la interdisciplina”.
Asimismo, el Dr. Ricardo Barra, que entre otras materias ha desarrollado líneas de investigación asociadas a la contaminación ambiental y los efectos de contaminantes sobre organismos acuáticos, sostuvo que “es un tremendo privilegio poder concretar una iniciativa que veníamos madurando hace bastante tiempo, y que puede mirarse también como una continuidad del trabajo que estaba haciendo el Núcleo Musels en el ámbito de la investigación en zonas costeras y su interacción río-océano. En lo específico, espero poder aportar en temas como contaminación costera y sus múltiples dimensiones, un aspecto en donde como centro de investigación ya tenemos desde el Centro Eula una experiencia importante con la que contribuir”.
PROCESO COMPLEJO
La Iniciativa Científica Milenio financia y apoya a centros de investigación, que destacan por su excelencia académica en las áreas de ciencias sociales y ciencias naturales. Estos centros son adjudicados a través de un largo y altamente competitivo proceso de selección, en el que participa un comité de investigadores internacionales de alto nivel e independientes de los postulantes.
En ese escenario, sólo dos institutos Milenio fueron adjudicados este año, siendo el Instituto SECOS seleccionado en primer lugar de un listado de seis propuestas.
De esta manera, el Instituto SECOS estará estructurado de una forma única y muy diferente que los actuales centros milenios o FONDAP, ya que estará basado en plataformas de aprendizaje donde los distintos tipos de conocimiento pueden interactuar, para encontrar soluciones sostenibles a problemas ambientales que afectan a las zonas costeras a lo largo de toda la costa de Chile.
Su plan de trabajo se basa en el estudio de unidades experimentales socio-ecológicas de pequeña y mediana escala, entendidas como plataformas de aprendizaje. Estas abordarán temas fundamentales de la pesca artesanal, la acuicultura y el desarrollo costero.
Para los diez años de existencia que tiene proyectado, el instituto contará con un presupuesto cercano a los 10 mil millones de pesos.