En el marco de la discusión del proyecto de ley sobre la prohibición de la captura del salmón escapado, la organización Oceana dio a conocer su punto de vista sobre los problemas del sector y los aportes que traería la moción.
La Comisión de Intereses Marítimos, Pesca y Acuicultura se encuentra en pleno análisis del proyecto, en segundo trámite constitucional, sobre la prohibición de captura de especies salmonídeas provenientes de cultivos de acuicultura y es justamente en este contexto en el que conocieron la realidad del sector y el uso de antibióticos, tema que ya había sido planteado por los propios senadores de la instancia parlamentaria.
Al respecto, la organización Oceana reconoció que con el proyecto en estudio se podrá conocer específicamente cómo se está comportando cada empresa en un barrio y se podrán propiciar una serie de herramientas con estos antecedentes.
Esto, precisaron, porque “el uso de antibióticos es alto en Chile, en comparación de Noruega (el principal competidor); con una deficiente regulación, bajos estándares de transparencia al acceso a la información; sumado a que el consumidor local e internacional no se encuentra informado, por lo que hay bajos incentivos para que las empresas disminuyan el uso de antibióticos”.
Liesbeth Van Der Meer, vicepresidenta de la organización detalló que “en los salmones escapados se encontraron especies endémicas y se detecto que el 99% de la población había sido arrasada por la presencia del salmón, que es carnívoro. Es como el león en la tierra, pero en el mar, necesitan otro tipo de proteína para poder crecer, por ello cuando se escapan comen cualquier especie que encuentren en su camino. (…) Es importante lo que dice el proyecto sobre establecer una pesquería para los salmones escapados, porque ellos no tienen depredadores tope”.USO DE ANTIBIÓTICOS
Por su parte, Javiera Calisto, directora de la campaña de Contaminación Marina manifestó que sobre el uso de antibióticos están trabajando, desde hace 4 años, por la transparencia de su uso en la salmonicultura.
“Este proyecto tiene un artículo relevante que establece que mensualmente la industria debe publicar el uso de antibióticos y pensamos que esto provocará su menos uso”, sentenció Calisto, quien además explicó que estos medicamentos solo pueden ser administrados por un médico veterinario.
En la misma línea agregó que “hoy la legislación prohíbe el uso preventivo, pero no existe un tope para la entrega. Entendiendo esto, y debido a la ausencia de normativa, en 2017 el consumo para una tonelada de salmón fue de 497,1 gramos, mientras que en Noruega fue de 0.4 gramos por la misma tonelada; es decir, en esta industria Chile utilizó casi 1.400 veces más gramos de antibióticos por tonelada de salmón producida”.
Según explicó, “para garantizar la inocuidad se estipula un “tiempo de carencia”, pero hay resistencia bacteriana, mutan y sobreviven a la acción del antibiótico y si bien este es un proceso natural, se ha incentivado por el excesivo uso de antibiótico, y esto es en las personas como en los animales”.
Cabe precisar que el salmón local está afectado, principalmente, por SRS que es la principal enfermedad bacteriana. “En Chile tenemos el SRS que se aloja en el riñón del salmón y para que el salmón logre crecer se necesita un período del antibiótico. Se está buscando vacuna, pero es una bacteria muy fluctuante; además, tenemos gran cantidad de piojos que lo están afectando también”, puntualizó Calisto.
Durante la sesión, el senador Rabindranath Quinteros, presidente de la Comisión de Pescamanifestó que hay que “aprovechar que ese está viendo este proyecto para tomar los resguardos y así fortalecer la industria, pero con el cuidado medioambiental que se requiere”.
El proyecto continuará siendo analizado por la instancia parlamentaria, que ya escuchó a la Subsecretaría, SERNAPESCA, SalmonChile, y CONAPACH.
Fuente: Senado