FAO
Ayudar a los pequeños agricultores, especialmente en los países de ingresos bajos, a invertir en la agricultura resiliente al clima y orientada a los resultados es esencial para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible y evitar una “crisis económica catastrófica”, señaló Bill Gates, copresidente de la Fundación Bill y Melinda Gates, en un acto especial celebrado durante el 42.º período de sesiones de la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
“Los pequeños productores están acostumbrados a superar increíbles adversidades e innovan constantemente en función de los cambios en las condiciones climáticas y las demandas del mercado”, afirmó Gates. “Sin embargo, no podemos lograrlo solos”.
Gates pronunció la disertación en memoria de McDougall, que tiene lugar cada dos años y es un homenaje al legado de Frank Lidgett McDougall, un experto agrícola australiano que desempeñó un papel decisivo en la creación de la FAO.
El emblemático empresario de tecnología y cofundador de la Fundación Bill y Melinda Gates tiene una relación de larga data con la FAO. El año pasado la Fundación donó 10 millones de USD para la lucha contra el recrudecimiento de la plaga de la langosta del desierto en África liderada por la FAO. Las dos organizaciones también colaboran en varias cuestiones fundamentales en sus misiones.
“Como asociados, compartimos la creencia en el poder de la ciencia y la tecnología para impulsar la salida de la pobreza de millones de personas, mejorar la salud y el bienestar de la población y asegurar que todas las personas tengan acceso a alimentos suficientes y nutritivos”, observó el Director General de la FAO, Sr. QU Dongyu, quien presentó la disertación y encomió el compromiso de Gates con la FAO y su noble misión.
Cambio climático, datos y productividad
En su disertación, Gates advirtió que el cambio climático ya había reducido el crecimiento de la productividad agrícola y que se preveía que los rendimientos de las cosechas disminuyeran un 30 % y que, por lo tanto, subieran los precios de los alimentos y aumentara la exposición de los agricultores a las sequías e inundaciones, lo que empujaría al hambre a millones de personas más.
“Es particularmente injusto que los países que menos han contribuido a las emisiones de gases de efecto invernadero -y que desde hace más tiempo esperan las vacunas contra la enfermedad por coronavirus (COVID-19)- sean los más afectados por estos desafíos”, señaló.
Subrayó que el Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 hace un llamamiento a acabar con el hambre de aquí a 2030 y a duplicar de forma sostenible los ingresos y la productividad de los productores de alimentos en pequeña escala. Para otorgar validez a estas metas ambiciosas, se necesitan mejores datos a fin de medir los progresos registrados en este sentido. La Fundación Bill y Melinda Gates apoya la labor estadística de la FAO con objeto de subsanar la falta de datos.
Gates elogió la iniciativa “50 x 2030”, codirigida por la FAO, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola y el Banco Mundial, cuyo objetivo es ayudar a 50 países de ingresos medios y bajos a recopilar, analizar y utilizar datos para hacer un seguimiento de los progresos y mejorar la formulación de políticas.
Asimismo, elogió el proyecto Ceres2030 por utilizar los nuevos avances en el aprendizaje automático para crear una base de datos sobre conocimientos relativos a intervenciones eficaces dirigidas a pequeños agricultores y encomió también la labor de la Unión Africana sobre una “tarjeta de puntuación” de la transformación agrícola africana para el seguimiento de tendencias.
Gates destacó el “buen trabajo que se está llevando a cabo en toda África a fin de ayudar a los agricultores a adaptarse y crear soluciones a largo plazo a las amenazas que plantea el cambio climático. Por ejemplo, los productores de África oriental están utilizando macrodatos para desarrollar un sistema de alerta temprana sobre brotes de la roya del tallo del trigo”, cuyos costos rondan los cientos de millones de dólares y que ya ha prevenido una epidemia. Hizo también referencia a las plataformas móviles que permiten a los pequeños agricultores comprar insumos, obtener asesoramiento técnico, solicitar créditos y seguros de cosecha y encontrar compradores para sus productos.
Los investigadores del Grupo Consultivo sobre Investigaciones Agrícolas Internacionales (CGIAR), la red mundial de investigación de la cual forma parte de la FAO, están realizando una excelente labor para mejorar la nutrición, salvaguardar la biodiversidad y desarrollar variedades de cultivos más productivas y resistentes al clima, con un elevado rendimiento de la inversión, comentó Gates. “Es fundamental que la FAO y otros organismos con sede en Roma brinden asistencia técnica y financiación a fin de potenciar las innovaciones y aprobaciones procedentes del CGIAR”, añadió.
En sus palabras de apertura ante la Conferencia, el Director General QU Dongyu destacó el compromiso de la FAO con los datos y la innovación.
“El futuro de la agricultura debe basarse en la ciencia, las innovaciones y las aplicaciones digitales. Los datos en tiempo real, las innovaciones en tecnologías, las políticas, los modelos operativos y las mentalidades serán de las personas y para las personas”, afirmó el Director General de la FAO. “Las aplicaciones digitales pueden ofrecer grandes ventajas en cuanto al aumento de la eficiencia, facilitan el buen funcionamiento de las cadenas de suministro y mejoran la sostenibilidad”.
Esta semana la Conferencia de la FAO se celebra de forma virtual por primera vez en su historia. La disertación pronunciada por Gates fue transmitida a través de la Web y puede verse aquí. Puede obtenerse información sobre las anteriores disertaciones en memoria de McDougall, muchas de ellas a cargo de destacados líderes mundiales y receptores del Premio Nobel, aquí.
La disertación dio lugar a un panel de debate de alto nivel moderado por Máximo Torero, Economista Jefe de la FAO, que incluyó intervenciones de Jewel Bronaugh, Vicesecretaria de Agricultura de los Estados Unidos de América; Thoko Didiza, Ministra de Agricultura, Reforma Agraria y Desarrollo Rural de la República de Sudáfrica; Víctor Manuel Villalobos Arámbula, Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de México; William D. Dar, Secretario de Agricultura de la República de Filipinas; Saud bin Hamoud bin Ahmed Al-Habsi, Ministro de Agricultura, Patrimonio Pesquero y Recursos Hídricos de la Sultanía de Omán; Stefano Patuanelli, Ministro de Agricultura, Alimentación y Políticas Forestales de Italia, y David Hazlehurst, Vicesecretario del Departamento de Agricultura y Recursos Hídricos de Australia.