Pedro Sánchez anuncia además en Nueva York que el país aumentará su donación de vacunas a 30 millones. En su intervención ante la Asamblea General, hizo una defensa de la igualdad y el Estado de Bienestar, y aseguró que el enemigo del multilateralismo es del extremismo.
“Los derechos sobre las patentes no pueden ser un obstáculo en esta situación de emergencia sanitaria mundial”, aseguró este miércoles el presidente del Gobierno de España desde el podio del Salón de la Asamblea General de la ONU.
Uniéndose de esa forma a las voces del Secretario General y el director de la Organización Mundial de la Salud en esa materia, Pedro Sánchez reiteró su propuesta “para resolver los cuellos de botella de producción y distribución” y pidió “una posible exención temporal de las patentes de las vacunas”.
Mostrando su compromiso con su propuesta, anunció que “España aumentará en 7’5 millones de vacunas su donación a terceros países”: en lugar de los 22’5 millones a los que se había comprometido, elevando así a 30 millones el número de vacunas que el país entregará a otras naciones con menores ingresos, y dejando abierta la posibilidad de aumentar todavía esa cifra.
Sánchez dijo que priorizará la entrega de parte de esas vacunas a América Latina, de la que recordó solo tiene el 9% de la población, pero el 30% de las muertes por COVID-19.
Además, anunció la entrega de dos millones de euros a UNITAID, organismo responsable del pilar de diagnósticos dentro del ACT Accelerator (Acelerador de Herramientas contra el COVID-19), que se sumarán a los 175 millones de euros que España ya ha dedicado al desarrollo y producción de vacunas entre 2020 y 2021.
Una recuperación justa
El presidente del Gobierno español dijo que “la pandemia nos deja otra evidencia: que solo gracias a las medidas y a los recursos excepcionales movilizados por los gobiernos de todo el mundo, cada uno en función de sus posibilidades, se ha podido evitar una devastación económica y social sin precedentes”.
Y añadió que el Gobierno de España ha afrontado esta emergencia desde una propuesta muy clara: la del Estado del Bienestar y el multilateralismo.
“Siento una gran satisfacción al comprobar cómo otros muchos gobiernos siguen esta misma senda, propiciando un cambio de paradigma mundial respecto a los errores cometidos en crisis pasadas. Es, sin duda, el momento de revertir unas tasas de desigualdad y de recortes en servicios públicos que tanto debilitaron a nuestras sociedades ante la llegada inesperada de la pandemia”, agregó, asegurando que no existen soluciones estrictamente domésticas sino “soluciones comunes para problemas globales”.
En exe contexto, dijo que su Gobierno “desea luchar contra la pobreza y la exclusión en todas sus formas, en España y en el mundo”, reformando el “modelo de desarrollo a fin de hacerlo más sostenible”. También defendió que las instituciones financieras internacionales puedan brindar el apoyo financiero y técnico que necesitan muchas economías en desarrollo y emergentes en este preciso momento.Las energías limpias y renovables jugarán un papel clave en la reducción de los efectos del cambio climático. Foto: Banco Mundial/Dana Smillie
Emergencia climática
Sánchez se refirió después al cambio climático, del que dijo es “la gran crisis de nuestra era”, y añadió que nuevamente se trata de “un problema común, con causas comunes que deben tener respuestas compartidas desde el más alto nivel de multilateralidad”.
Por ello, anunció que España entregará 30 millones de euros a la financiación climática, de acuerdo con los compromisos y objetivos que marca el Acuerdo de París de lucha contra el calentamiento global.
Tras exponer las tres crisis, la de la pandemia, la económica y la del cambio climático, reiteró que solo se puede luchar contra ellas de forma unida.
“La Historia nos ha enseñado que ningún país consigue un objetivo trascendental desde la unilateralidad, desde la individualidad, desde la soledad en mitad de un mundo globalizado. El enemigo del multilateralismo es el extremismo; no nos dejemos engañar por aquellos que desde el egoísmo y el individualismo nos quieren hacer creer que las causas colectivas que nos unen son causas que no merecen esfuerzo”, concluyó.