Karen Rauch
Directora ejecutiva Camiseteados
En medio de las contingencias, las diferencias políticas y la vorágine del día a día, qué lindo es detenerse un momento a mirar las cosas buenas que tenemos como país y que tanto nos cuesta ver. Eso es, justamente, lo que nos alegró al revisar los recientes resultados de un estudio realizado con Ipsos a lo largo de Chile, que concluyó que el 53% de los chilenos considera que somos camiseteados, entendiendo el término como toda persona que cree y se involucra con el cambio social positivo, liderando proyectos que impactan la comunidad. La misma medición, que abarcó más de 600 casos, reflejó que somos admiradores de la empatía con los demás, algo tan necesario por estos días.
Sin embargo, al mismo tiempo, y sin ánimos de dar un toque negativo sino constructivo,
los datos indican que el 67% asegura que actualmente se reconoce muy poco y no se da la vitrina adecuada a las personas solidarias y comprometidas con causas sociales. Junto con eso, enfatizan en que esto debiera hacerse públicamente pues es la mejor manera de inspirar a otros.
Esta conclusión nos anima a seguir con la labor que iniciamos hace ya cinco años, buscando y destacando referentes que con acciones simples y desinteresadas impactan buscan mejorar el mundo motivando, y aportando a que esto sea visto como importante y necesario. Soñamos con que un día estas historias de héroes anónimos ocupen portadas y extensos reportajes en televisión, pues estamos convencidos de que somos el reflejo de lo que vemos y que dando visibilidad a esos casos inspiraremos a otros a tomar acción e impulsar así un círculo virtuoso de buenas acciones.
Aunque no lo creamos el espíritu lo tenemos. Sí, somos camiseteados. Quizás ahora sólo nos falte destacarlo.