El Secretario Ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego participó en la 21ª Semana de la Sostenibilidad, organizada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Estados Unidos, instancia en que planteó los principales desafíos que tiene el Estado de Chile para el desarrollo del riego.
En su participación en la 21ª Semana de la Sostenibilidad, organizada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Florida, Estados Unidos, el Secretario Ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego (CNR), Wilson Ureta, afirmó que uno de los desafíos que tiene el Gobierno del Presidente Gabriel Boric es impulsar un desarrollo del riego “justo y sustentable”.
“Nos hemos hecho cargo del desafío de desarrollar el riego, avanzando en un desarrollo rural, justo y sustentable. Lo anterior, en el sentido de poder abordar las brechas sociales que existen en el campo chileno con soluciones que sean sustentables en el tiempo”, detalló Ureta.
En su presentación, la autoridad destacó que en el actual contexto de crisis hídrica y climática nuestro país tiene desafíos inmensos. “Un primer desafío de la institucionalidad chilena es establecer una gobernanza más moderna al escenario actual; también es deber del Estado poder generar las condiciones básicas para asegurar el consumo de alimentos; y el riego tiene directa relación, ya que es parte intrínseca de la agricultura, tal como lo es sembrar o cosechar”.
“El Estado tiene el deber de que las soluciones que genere ante estas problemáticas tienen que también procurar una mayor equidad social, que llegue a toda la población, y que esas políticas no incrementen las brechas; por ejemplo, entre pequeños, medianos y grandes agricultores, entre las mujeres y los hombres, y también en nuestro caso poder interpretar las expectativas de los pueblos indígenas para su desarrollo”, puntualizó.
Al hablar de gobernanza del agua, recalcó que “la visión del Estado tiene que ser territorial y no a nivel puntual (…) en el ámbito de la eficiencia hídrica históricamente siempre los organismos del Estado se han preocupado por el aumento de la tecnificación intrapredial, el aumento de la impermeabilización de las obras de canalización, de las obras de acumulación, pero muchas veces eso ha tenido costos en las comunidades locales, ya que no se involucra a todos los actores de las cuencas en las políticas públicas asociadas al riego”.
Finalmente, el Secretario Ejecutivo indicó que la Comisión Nacional de Riego tiene como política la capacitación y la transferencia tecnológica hacia las y los agricultores. “Progresivamente, en los últimos años, se han aumentado los recursos para programas de fortalecimiento de las organizaciones de regantes, para programas de capacitación y de difusión para regar bien en dos aspectos: en el predio, pero también favorecer esa visión de cuenca más integral, comprendiendo una eficiencia hídrica global, que favorezca la reposición de agua al acuífero o a los cauces de las cuencas”, detalló.