Chile se ha comprometido en el marco de su Contribución Nacional para el Acuerdo Climático de París de 2015, en reducirsus emisiones de gases efecto invernadero (GEI) en un 30% por unidad de PIB al año 2030, con respecto al 2007.
Para lograr este compromiso el sector energético resulta fundamental, pues el 78% de las emisiones totales de GEI del país corresponden a este sector. Es en base a este contexto, que el Ministerio de Energía implementó el plan de descarbonización, el cual consiste en el retiro de operaciones de las centrales a carbón y que fue presentado en el Biobío, esta mañana, por el Intendente, Sergio Giacaman, junto a los Seremis de Energía, Mauricio Henríquez y Medio Ambiente, Mario Dellanays.
Para la región del Biobío, este hito representa, en una primera instancia, el cierre de la Termoeléctrica de Bocamina I en Coronel a fines del 2024. “El anuncio de un plan de retiro voluntario de centrales a carbón representa un proceso inédito en Chile, y nos permite ser un referente mundial respecto al cuidado del medio ambiente. Para nuestra región este tema es relevante, porque nos permitirá cerrar una de las centrales termoeléctricas de Coronel, en un plazo no superior a los 5 años, lo cual solo traerá beneficios”, señaló el Intendente del Biobío, Sergio Giacaman.
Para materializar este desafío el Ministerio de Energía, conformó la “Mesa de Retiro y/o Reconversión de Unidades a Carbón”, con el objetivo de analizar los efectos de esta medida sobre la seguridad y la eficiencia económica del sistema eléctrico nacional, la actividad económica local y su impacto medioambiental.
Actualmente en la región del Biobío, el 27% de la generación eléctrica, que se genera es usando carbón, la cual al 2040 deberá ser reemplazada por energías renovables. Para el Seremi de Energía, Mauricio Henríquez, este plan de acción traerá consigo la construcción de nuevos proyectos. ”El retiro de las centrales de generación de carbón es un trascendental avance hacia la carbono neutralidad requerida para enfrentar el cambio climático. Mediante un retiro responsable y sostenido en el tiempo, tenemos que reconvertir en un plazo de cinco años los 128 MW que representa hoy Bocamina I y comenzar a generarlos a través de ERNC, para eso, debemos potenciar la instalación de nuevos proyectos vinculados a las energías limpias. Tal como lo establecimos en la Ruta Energética, impulsada por el Presidente Sebastián Piñera y nuestro Ministerio”.
Por su parte el Seremi de Medio Ambiente, Mario Dellanays, valoró este anuncio que favorece a la región del Biobío. “Para efectos de cambio climático, de fuentes de emisión de carbono y de material particulado, sin duda que esta noticia es fundamental e importante y marcan un hito, ya que la Región es capital energética a nivel nacional. Esperamos pronto y dentro de las capacidades tecnológicas, poder reforzar y actualizar estos anuncios”.
Una vez que las centrales a lo largo del territorio retiren su operación podrán entrar a un nuevo estado operativo denominado “Estado Operativo de Reserva Estratégica” (ERE), cuyo objetivo es dar garantías de seguridad al Sistema Eléctrico Nacional. Las centrales en ERE solo podrán ser convocadas por el Coordinador Eléctrico Nacional en circunstancias de urgencia, en las que se prevea un importante déficit de suministro. El período en el que podrán permanecer en este estado no podrá ser superior a 5 años, previo a su cierre definitivo.
Adicionalmente, el retiro al 2040 representa un período razonable toda vez que los retiros graduales permitirán abordar impactos laborales, permitiendo la reconversión la fuerza de trabajo, y la materialización de nuevas inversiones. Adicionalmente, con este plazo se respetan los contratos vigentes de las compañías y las inversiones realizadas por las centrales más nuevas.
Por otro lado, el nivel de inversión requerida aumentará considerablemente debido a la necesidad de reemplazo de las centrales. La diferencia entre escenarios sin descarbonización y con un plan de retiro de centrales implica un aumento de USD 20 mil millones en la inversión requerida durante todo el periodo hasta el 2040, que se explica principalmente por nuevos requerimientos de generación y líneas de transmisión.
La autoridades recalcaron que este cronograma busca equilibrar adecuadamente los tres pilares de la sostenibilidad, de manera de lograr el impacto ambiental deseado, pero a su vez resguardar la seguridad y eficiencia económica del sistema y las problemáticas sociales vinculadas a la pérdida de empleos en las comunas en donde están ubicadas estas centrales.